Acción social o ¿cómo detener la basura electoral?

Como muchos, estoy indignada por la cantidad de carteles electorales que contaminan nuestras calles. Para dar un ejemplo (por si alguien lo duda)  tomé estas fotos en el kilómetro y medio del Estadio Azteca hacia Gran Sur, sobre Avenida del Imán (sin ningún afán partidista, este es problema de todos):

El exceso de publicidad me parece francamente agresivo. Por eso le escribí a los siguientes candidatos:

  • Héctor Hugo Hernández, diputado federal, Tlalpan
  • Dolores Padierna, precandidata al senado de la República
  • Mauricio Toledo, precandidato a la jefatura delegacional, Coyoacán 

 No encontré manera de comunicarme con algunos otros:

  •  Ariadna Montiel, precandidata a la jefatura delegacional, Coyoacán 
  • Hegel Cortés, precandidato para diputado, Coyoacán
  • Héctor Serrano, precandidato para diputado, Coyoacán
  • Cuahutemoc Sánchez, precandidato a la jefatura delegacional, Tlalpan
  • Eduardo Greco, precandidato a la jefatura delegacional, Tlalpan

Pero aquellos que tienen información de contacto en sus páginas oficiales recibieron una versión de esta carta:

Carta a los candidatos:

Antes que nada, permítame felicitarlo/a. Es imposible ignorar su campaña electoral, los carteles que ha colocado en las calles se han convertido en parte obligatoria de nuestro paisaje urbano.

Pero, así como es inevitable encontrarse con una versión ampliada de su semblante en todas las esquinas, es inevitable preguntarle: ¿Qué tan necesario es pegar tres copias idénticas de su cara en un mismo puente peatonal? ¿Es este, de verdad, un método efectivo de persuasión?

Por medio del Internet pude enterarme de su postura, ya que aquellos afiches sólo me brindaron la información suficiente como para reconocerlo/a en una fiesta, no para orientar mi voto.

Si usted presume amor por su ciudad, ¿cómo cree que ésta se ve afectada por sus carteles? Si en sus discursos aborda el problema de la desigualdad social, ¿en qué manera cree que los más pobres se ven beneficiados por su publicidad? ¿No encontró una mejor manera de utilizar su presupuesto? ¿No es su labor como funcionario público la de mejorar nuestra calidad de vida, incluyendo nuestro medio ambiente?

Me imagino que para resistir la lluvia, el polvo y el viento durante la contienda, sus carteles no son biodegradables. Está usted, con su campaña electoral, generando basura que permanecerá contaminando nuestra ciudad durante varias generaciones. Me preocupa que no haya considerado las consecuencias estéticas, económicas, ecológicas, y éticas de su campaña.

Ya que en su página se muestra sumamente interesado/a por las propuestas ciudadanas, yo propongo que retire esos carteles y que, de ser posible, llegue a un acuerdo con los demás candidatos para hacer lo mismo.

He publicado una versión de esta carta en este blog: https://ocupacioneslibres.wordpress.com/, con la esperanza de que podamos iniciar un diálogo público sobre el tema.

Espero que acepte esta invitación para demostrar sus buenas intenciones y me mantengo al pendiente de su respuesta.

Atentamente

María Cristina Alemán L.

Por favor (si están de acuerdo conmigo) compartan la carta, modifíquenla a su gusto, mándenla a sus candidatos locales (o nacionales). Basta de quedarnos con los brazos cruzados.

¡Gracias!